junio 23, 2005

Insisto. Se me acaba la paciencia en este lugar. Yo qué rayos tengo que ver con ventas; yo lo que manejo es concepto editorial, lidiar con el ente mutante que ya es decir algo, y escribir hasta que la revista esté llena. A mí qué me conciernen las ventas. Por qué cuernos tengo que responder porque fulanito no vendió, vendió mal, vendió y no cumplió. Será porque claro, mi nombre corresponde al de la gil que sale en los créditos. Voy a pedir que lo quiten, para lo que me sirve. Para meterme en líos.

Veamos otras posibles vocaciones. Siempre he sido buena para... a ver, no, eso no. Nadie me va a pagar por ver monos chinos. (Qué cool, Roberto Aguilar). Nadie me está pagando por escribir mis tonteras a media noche.

No se me ocurre qué más. La veintiúnica cosa para la que soy útil me está torciendo la vida justo ahora y por el rumbo que no quiero. Siempre dije que cuando me dejara de gustar lo que hago, adieu. No me ha dejado de gustar. Pero están haciendo que se vuelva cada vez menos placentero, más burocrático, y que asuma cosas que definitivamente no me da la gana de poner en mi mochila, que ya bastante pesada está.

Hoy se impone Concilio Jedi. O sea, con Reivaj y mi padre (mi madre no escucha y se va a los extremos). Esto me está molestando demasiado y hace días que no se me quita el dolor de estómago, señal indudable de que no estoy feliz.

Lo necesario es pensar ¿qué más quiero y puedo hacer para no volver al parasitismo?

Thesaurus

Idealismo: Asunto que requiere tiempo y energía. Yo no tengo.

Al momento

  • Fragile Things, N. Gaiman