Chasco

Apelo al alto tribunal, esto no se puede tolerar. Tan contenta que andaba yo, con apenas un ejercicio no resuelto, preparada para la masacre helena. Y los demás, bien gracias. El profesor, al que usualmente le valen nuestros ruegos, dijo que no había caso, que si íbamos todos a tener cero -todos no, pensaba yo amargamente- no valía la pena ponerse a revisar.

Exijo justicia ¬¬

Espero que a ti no te hagan esto, FAP, camarada estudiante.

Algo tenían que hacer para acallar mis justas demandas. Así que subió la secretaria a anunciar que el próximo jueves nos darán libre, los profesores se van de paseo. Con los ánimos más templados, bajé a sentarme a las escaleras con una revista para esperar a Reivaj. Estaba de lo más entretenida, cuando mi amiga la china (se llama Jossie) se sienta conmigo y me pide prestado el teléfono para jugar. Y en eso, despega los ojitos y grita como si hubiera visto una rata monstruosa.

Es que era una rata monstruosa, subiendo ágilmente por el pasamanos. Yo, tan ciega, al principio la confundí con un gato. Luego, la comprensión llegó y ¿qué hice? Pues me quedé quietecita, qué iba a gritar a ver si creía que la estaba invocando y venía hacia mí (la otra explicación es, no fuera a ser alguna colega del Club de la Rata y se resintiera). Pasó al lado de nosotras, tan campante, y salió a la calle. Alguien vino a ver por qué el escándalo, y nos encontró congeladas en la escalera.

Para mi consuelo, Reivaj estaba en el último piso y no se enteró.

(Flash informativo, por acá me pasan el dato de que en los malls están vendiendo tallarines de mango. Pongo cara de disgusto imaginando la mezcla hasta que me explican que es fruta cortada en tiras y aderezada con sal, pimienta, limón, frutilla, miel o leche condensada. Ya sé por dónde merodearé este fin de semana. Ahora el dilema es ¿cuál pediré? Asesórenme.

Me siguen regalando dulces, se los dije, confirmado que es octubre.)

Y por cierto, tenemos visitas. Brujas y brujos, no de Hogwarts, sino de la lista de Literatura para chicos (en la que me doy el gusto de estar y, aunque no participo como debiera, cómo me cambian el día sus mensajes) descubrió este blog. Ya un par aterrizaron por aquí. Gragry, Blanca, gracias. A los demás, bienvenidos.