De chiste en chiste...

Bender: Miserable esclavo, porqué no estás trabajando?
Esclavo 1: Eso hago...
Bender: Quiero decir, hasta morir.

Esclavo 2: Poderoso Faraón, me duele al respirar.
Bender: Bueno, ¿entonces qué crees que deberías dejar de hacer?

Sí, nueva semana, mi puñado de páginas en blanco, y doña inspiración/desesperación trabajando a toda máquina.



No recuerdo si el año pasado hice lista de buenos propósitos. En todo caso no la puedo encontrar, y me alegro porque, como diría el sabio Bugs Bunny, creo que a los primeros meses del 2005 seguí de largo cuando debí haber virado a la izquierda en Albuquerque. Tampoco pienso hacerla este año. O más bien, me hago un propósito en general. Dejar de preguntarme tanto qué esperan los demás de mí. Preguntarme más seguido qué mismo es lo que quiero yo. A ver si al próximo diciembre me siento más contenta conmigo.



Al y la paparazza ya fueron oficialmente presentadas. El sábado por andar conmigo le tocó acompañarme al trabajo. Y así, también tuvo ocasión de conocer -aunque un codazo repentino e injustificado me impidió cumplir con las formalidades- al Ente Mutante himself.

Para que no se aburriera, la dejé moneando en mi escritorio. Al rato todo Arte me preguntaba quién era la pelada nueva.

- Ah, ¿ella? No, nada, es la chica que va a ser mi reemplazo, le estoy enseñando a usar el sistema editorial.

Y se hizo el silencio.

- Pero... pero... ¿ya no vas a escribir?

Dael adopta el tono idealista y soñador que en el fondo está muy lejos de sentir (¡gracias Candy Candy por proporcionarme el material!), y contesta:

- ¿Yo? Yo lo único que medio sé hacer es escribir, y es lo que haré hasta el último día que esté viva, esté donde esté (V___V) *música de fondo*

- Pero... pero... ¿y MM?

- Bueno, todo cambia. Una nueva persona le va a dar a MM más vida. Y yo también tengo que pensar en otras cosas.

Cosa rara, la pléyade se negó a que les presentara a Al. Que mejor otro día XD Salados ellos, porque quedó medio asustada y dudo que la ocasión se repita. Ya me dijo Reivaj que cuidado por andar hecha la chistosa se me cumple, pero para entonces, la cómoda que soy encontrará la manera de sacársela diciendo que eso es a lo que yo llamo propiciar el destino. Claro que eso daría al traste con el resto de mis planes *suspiro*. Más trigo al molino.